Ya a principios de los 90, cuando un movimiento medioambiental que se hacía cada vez más fuerte en Alemania consiguió que se reflexionara en profundidad sobre la relación con la naturaleza y los recursos disponibles, LAMBERTS empezó a interesarse de forma intensa por la mejora ecológica de todos los procesos relevantes de la empresa, en especial en la producción. Cada vez con más motivación al vivir desde 1887 en Fichtelgebirge con su fantástica naturaleza, el fundador de la empresa Laurenz Lamberts escogió Wunsiedel-Holenbrunn debido a su perfecta situación geográfica porque aquí se podía fabricar vidrio a partir de productos naturales extraídos de la región.

En la primera fase se analizó e indagó sobre los métodos de fabricación (tipo de horno de fundición y alimentación) así como un mayor uso de vidrios reciclados a partir del propio circuito económico.

Concentramos todas las medidas a lo largo de los años en nuestro concepto «LAMBERTS iEcoGlass» que sigue siendo único en el área del «vidrio de construcción y arquitectónico».

Entretanto se impone poco a poco el convencimiento de que, el uso de productos ecológicos de construcción puede contribuir al comportamiento medioambiental en general, pero también a un incremento del valor de los proyectos, en especial si los edificios se construyen de acuerdo con los sistemas y etiquetas de calificación medioambiental pioneros en los países correspondientes. Mediante la mencionada EPD, los proyectistas e inversores tienen también una excelente base para la utilización de vidrios LAMBERTS en tales proyectos.